La deportividad de Vencedor frente al 'teatro'  de Messi

02.02.2021

El centrocampista del Athletic no se dejó caer a pesar de recibir un doble golpe del futbolista del Barcelona

I. E.

Mucho se ha hablado en estos días del disparatado contrato firmado por Messi con el Barcelona, con unas cifras superiores a los 555 millones de euros. 

Desde el entorno barcelonista han sido numerosas las voces que no solo no han criticado el alto coste del sueldo a la estrella argentina, sino que incluso han llegado a argumentar que le ha salido barato al Barcelona.

Opiniones para todos los gustos, pero lo que está claro es la deuda multimillonaria del club blaugrana, tanto por este dispendio económico como por los fichajes carísimos y los altos sueldos pagados a sus futbolistas en estos últimos años.

Pero aparte de esta situación extradeportiva, el pasado domingo, metidos en tema futbolístico hubo una acción para la polémica en la que estuvo involucrado el futbolista del Barcelona.

Jugada clave en el minuto 19

Era el minuto 19 de partido cuando Mateu Lahoz pitó una falta inexistente de Vencedor a Messi, que posteriormente supuso el gol blaugrana. Viendo detenidamente la jugada, el centrocampista del Athletic permanece quieto en la marca frente al argentino, y es este quien tras pasar el balón a banda, corre y salta sobre el de Rekalde golpeándole con ambas manos sobre la cabeza.

Culmina esa acción dejándose caer descaradamente sobre el césped. Vencedor sí saca el brazo cuando ve que llega sobre su radio de acción, pero de manera deportiva, sigue el juego sin intentar engañar al árbitro de la manera que lo hace su oponente, al dejarse caer al suelo de manera artística.

Mateu Lahoz, muy proclive con sus decisiones a lo largo de su trayectoria a perjudicar al conjunto bilbaíno, no duda y en vez dejar seguir la jugada, pita la falta en contra del Athletic, dejando sin castigo el claro golpeo de Messi con las manos sobre Vencedor.

Era la primera infracción sobre el rosarino en el partido. Finalmente fueron 4 las faltas que señaló hasta la conclusión del encuentro. 

Ganas de revancha

Messi tenia ganas de revancha tras la derrota y la expulsión en la final en la Supercopa, cuando golpeó de forma parecida a Villalibre. En aquella ocasión si que era obstrucción del delantero del Athletic, pero tuvo que intervenir el VAR, puesto de Gil Manzano no pitó falta ni vio el golpeo sobre el Búfalo en directo.

El domingo, Mateu estuvo mucho más atento para señalar la supuesta falta en una zona perfecta para el golpeo del argentino. En el campo se oyó, "quería pitarla desde hace dos semanas, desde Sevilla". Los leones estaban avisados de lo que podía ocurrir.

Lo que vino después fue el golazo del atacante culé por la escuadra.