El despliegue de Yuri Berchiche no fue suficiente en el Camp Nou

01.02.2021

El Athletic sacó partido de una jugada del lateral zurdo, pero por banda derecha apenas hubo acompañamiento frente al Barcelona

I. E.

El Athletic ofreció ayer dos caras distintas. En la primera parte, los leones apenas tuvieron oportunidad de superar la presión blaugrana tras pérdida. Apenas hubo juego ofensivo por bandas. El viento, en contra, es verdad que también jugó una mala pasada.

Por la derecha ni Capa, ni De Marcos lograron desdoblarse con profundidad. En defensa no sufrieron demasiado, aunque Griezmann en un par de oportunidades consiguió penetrar y chutar a puerta. Jordi Alba también apareció alguna vez, pero no como suele ser habitual en él. Seguramente estaba avisado de la final de la Supercopa, en la que De Marcos le ganó la espalda para marcar.

Exigidos en defensa

Por la izquierda, Yuri Berchiche apenas se prodigó hacia delante y sufrió más de la cuenta con las incursiones de Dembélé, que también tuvo un par de ocasiones en chuts laterales. Muniain intentó buscar más apoyos por el centro, pero hasta 4 faltas recibió al controlar de espaldas e intentar girarse. Los culés sabían de su peligrosidad y no dudaron en pararle como fuera.

Estaba claro que algo tenía que cambiar el Athletic para intentar crear peligro en el Camp Nou y tras el descanso se vio otro encuentro.

Aquí, sí es cuando apareció Yuri Berchiche, sobre todo en los primeros 30 minutos de la segunda mitad. Hasta 5 veces consiguió subir por banda, sin que Dembélé hiciera prácticamente nada en defensa para intentar detenerle. Fue una verdadera autopista por donde llegó en el minuto 50 el gol rojiblanco.

Un centro perfecto del lateral hacia el segundo palo, donde Jordi Alba, esta vez sí más pendiente en defensa, no estuvo acertado y se marcó en propia puerta. De Marcos acompañó bien la jugada y estuvo presto para el remate.

Sin tino en algunos centros

Pero en el resto de ocasiones, al lateral del Athletic le faltó tino en el centro, salvo uno en el que Williams estuvo a punto de rematar. Muniain le dejó vía libre, participando algo menos en el juego, pero apoyando cuando la ocasión lo requería.

Sin embargo, el contrapunto llegó con el tanto definitivo de la victoria culé, cuando fue Dembélé, en una posición más centrada, el que dejó un balón para la llegada de Mingueza, que sirvió para que Griezmann marcara. Muniain se vio sorprendido y no pudo frenar la entrada del lateral blaugrana.

Sí que estuvo atento el navarro para apoyar a Berchiche superado en la incursión de Dembélé, que a punto estuvo de suponer un penalti, al caer ambos dentro del área.

Berenguer, pieza de recambio

Por la diestra, sin embargo, De Marcos y Capa siguieron sin dar señales ofensivas, aunque en defensa tampoco se vieron demasiado exigidos. La salida de Berenguer dio algo más de mordiente, pero sin consecuencias favorables para el Athletic. Finalmente, Lekue perdió un balón que a punto estuvo de costar el tercer gol del Barcelona.

Hasta el momento, con la forma de defender de los leones con Marcelino, colocados con 2 líneas de 4, los mayores problemas llegan por los laterales, ya que la basculación se produce con las piezas bastante juntas y en bloque alto, lo que permite a los rivales buscar las rendijas rojiblancas con aperturas a bandas, ya sea a los extremos o laterales.

El jueves frente al Betis será otra historia. (Fotos: Athletic Club)