Lezama cumple 50 años fidelizando ilusiones en rojiblanco

Iribar explica la importancia de la creación de la factoría rojiblanca para la historia del Athletic

I. E.

50 años han pasado desde que aquel lejano 27 de enero de 1971 se inauguraron las instalaciones del Lezama, la verdadera factoría del Athletic Club.

Un proyecto que tomó forma con Félix Oraá a la cabeza, quien fue el encargado de hacer realidad una idea se basaba en juntar en un mismo lugar de trabajo al equipo profesional, que se ejercitaba en San Mamés, al Bilbao Athletic y a los juveniles e infantil.

Se eligió Lezama para construir tres campos de entrenamiento, vestuarios, un gimnasio y habitaciones para realizar las concentraciones del primer equipo.  

Han transcurrido 50 años desde entonces y miles de canterano/as los que han tomado parte de la fábrica del Athletic, convertida a lo largo del tiempo en un centro de formación integral dotado de técnicos y especialistas con la misión de logar el crecimiento deportivo y personal de lo/as jóvenes talentos. 

Una figura mítica en el Athletic

El Athletic ha querido dar a conocer de primera mano la historia de las instalaciones, desde su creación, con una figura mítica que lleva esas cinco décadas ligado al club, como jugador, entrenador y ahora representante del club rojiblanco, José Ángel Iribar.

En un video el exportero del Athletic ofrece lo que ha supuesto para él y para el club bilbaíno la aparición de un lugar tan emblemático como es el emplazamiento de Lezama.

"Recuerdo aquel primer día, vinimos con toda la ilusión. Y nos gustó mucho, un espacio abierto increíble. Rodeado de naturaleza. Todo muy apropiado, ecológico, lo tenia todo", señaló Iribar.

"Teníamos un terreno de juego bien para entrenar y el resto los otros campos, estaban en ciernes, El proyecto estaba e ciernes. Pero nos alegramos mucho y nos vino muy bien. Para entrenar mejor, para tener más salud, venir a estos campos de Lezama. Los vestuarios estaban bien, el apartado de servicio mas necesario, la caseta estaba francamente bien. Arriba teníamos unas habitaciones para descansar antes de los partidos, una sala de juego, pin-pong billar, en aquella época era un avance", recordó el Txopo, sobre la importancia de tener ese tipo de instalaciones y servicios para desarrollar su trabajo.

"El futuro estaba en los jóvenes"

Y el exguardameta del Athletic destacó la importancia de Lezama en conseguir mantener un equipo al máximo nivel con jugadores que sientan pasión por el club. "El futuro estaba en los jóvenes, cómo entrenarles y cuidarles. Fidelizarles con el Athletic, era el objetivo y la clave de Lezama. Era necesario para poder avanzar. Sin Lezama el Athletic lo hubiera tenido crudo para estar tantos años en Primera", explicó.

Finalmente, tiró del orgullo que ha supuesto para él permanecer hasta hoy en el Athletic y en lo que se ha convertido Lezama en la actualidad. "Era como mi segunda casa, desde que se inauguró prácticamente todos los días hasta hoy, por suerte, He visto cómo ha ido evolucionando, creciendo y es maravilloso, para enseñárselo a todo el mundo", destacó.  (Fotos: Athletic Club)