La cruda realidad de Gaizka Larrazabal en el Zaragoza
El
exfutbolista del Athletic explica los motivos de su falta de integración, su deseo de triunfar en el
equipo maño y que no piensa en volver al club rojiblanco
I. E.
Gaizka Larrazabal no está pasando una buena temporada en el Zaragoza. Tras su marcha el pasado mes de octubre al conjunto maño, esperaba contar con más protagonismo del que está teniendo hasta el momento.
El exfutbolista del Athletic contó al principio para para Rubén Baraja, pero fue perdiendo sitio hasta que fue destituido en noviembre y su situación ha ido a peor tras la llegada de Juan Ignacio Martínez.
Ayer, en la web del diario elperiodicodearagon le hicieron una extensa entrevista a Gaizka Larrazabal en la que habló sobre cómo está siendo su primera temporada en el Zaragoza y de su salida del Athletic.
"Escribir mi propia historia como futbolista profesional"
El extremo zaragocista fue cuestionado acerca de un hipotético retorno al conjunto rojiblanco. "Es que ni me planteo eso. Yo, a principios de octubre, no salgo del Athletic pensando en volver, no miro atrás cuando cerré esa puerta para venir. Firmé tres años aquí, renovaré, me iré a otro sitio o Dios sabe qué pasará, pero no está en mi mente volver como objetivo. Si se da, lo haré encantado porque es el club de mi vida, pero ahora mi única visión es el Zaragoza y escribir mi propia historia como futbolista profesional", admitió, pensando en concluir su contrato en la capital maña,
Respecto a si ha sido un peso para él ser el hijo de un histórico rojiblanco, Aitor Larrazabal, con 445 partidos en el primer equipo , reconoció que "no, de verdad que no. Creo que siempre lo he gestionado bien, no me ha podido esa presión de decir como mi 'aita' ha hecho esto pues yo tengo que estar a su altura. Soy un chico muy positivo y sé que voy a triunfar, ojalá sea en el Zaragoza, pero no tengo ninguna presión por ser el hijo de Aitor para conseguir nada. Además, no nos parecemos como jugadores, somos muy distintos, él fue un gran lateral, siempre me decía que era de sangre fría, que apretaba los dientes y que no se le iba de la marca nadie. Además, también hizo su buen número de goles. Su ayuda y sus consejos siempre han estado ahí, pero no tengo más presión por ser su hijo".
Además, el ex del Athletic admitió que en estos meses malos le vinieron bien los consejos de su aita. "Me decía que trabajara en silencio. Y yo eso lo he vivido, porque siempre me he tenido que ganar el puesto allá donde he ido. Sí me pedía que estuviera tranquilo, que veía que quería hacer todo bien y no defraudar a nadie y que eso me podía jugar una mala pasada, y sobre todo que no me preocupara, que era mi experiencia fuera de casa y que me lo tengo que tomar como un aprendizaje", explicó.
Cuatro titularidades en Liga
Al joven atacante le está costando encontrar su sitio en el equipo en este curso. Solo ha tenido 4 titularidades en 26 partidos ligueros, (2 en Copa) 3 con Rubén Baraja y la última, precisamente, la pasada jornada frente al Oviedo de Ziganda, con derrota por 1-0. Le piló por sorpresa.
"Era difícil pensarlo sí, aunque desde que ha llegado este míster he entrenado a muy buen nivel. En los primeros meses, al ser la primera experiencia fuera de casa por la situación que vivió el equipo y por ese cúmulo de circunstancias se generó en mí una desconfianza. Me costó integrarme, en los entrenamientos no estaba al 100%, no me sentía a gusto", asumió.
Larrazabal se refirió a algunos motivos por los que le contó integrarse en el equipo. "Venía de un año sin continuidad, sin muchos minutos, en pretemporada pasé el virus, estuve confinado tres semanas, y no tuve una buena preparación como tal. El primer partido que juego fue en Alcorcón. A pesar de todo, me sentí a gusto, pero después la idea que me había hecho al venir no se fue cumpliendo y eso me afectó", indicó.
De esa manera, el ex del Athletic, aún no ha podido mostrar el nivel que él cree que puede llegar a alcanzar. "El tanto por ciento no sé, pero sí aseguro que puedo dar muchísimo más. Y recalco que, si no lo he hecho, no es porque no haya querido, es una cuestión de falta de confianza y de que en la vida todos tenemos épocas buenas y malas. Sé con plena certeza lo que puedo dar y sé que es mucho. Yo llegué al Zaragoza queriendo demostrar todo, sales al campo pensando en mil cosas y no haces una bien porque tienes la cabeza en otro sitio. La mente juega un papel muy importante y hay que saber gestionarla", se sinceró.
"Salir de mi zona de confort fue difícil"
Durante el pasado mercado invernal, se rumoreó que estuvo en la lista de descartes del Zaragoza, para dar entrada a algún refuerzo, pero según el bilbaíno, ni tuvo conocimiento de ello, ni él pidió una salida. "Ni una cosa ni la otra. No me lo planteé. El hecho de salir de mi burbuja en Bilbao, de mi zona de confort, fue difícil. Soy un chico muy familiar y en Zaragoza vivo solo, lo que ha influido en mi juego. Ahora que ya me estoy integrando, el hecho de buscar esa salida e irme a otra ciudad no iba a ser acertado. Y tampoco el club me lo dijo en ningún momento", lanzó.
Respecto al resto de Liga, con el equipo maño en lucha por no entrar en descenso, con 27 puntos y 15 jornadas por disputar, Gaizka espera tener oportunidades y mejorar sus prestaciones. "Yo diría que sí. Mucha gente que me conoce siempre me dijo que soy jugador de segundas vueltas y normalmente ha sido así, ya que he terminado jugando tras no ser la primera opción al llegar. A saber qué pasará. Ojalá suceda y vaya a más, pero lo que sí tengo claro es que voy a entrenar al máximo para que cada partido sea mejor", advirtió.
De cara a su futuro en el Zaragoza, aún
con contrato hasta 2023, con opción de recompra por parte del Athletic los dos
primeros cursos, el exrojiblanco no piensa en otra cosa que no sea lograr el
éxito. "Es que cuando tomo la decisión en ningún momento pensé que estaría aquí
de paso. Venía con la sensación de comerme el mundo, me habían hablado muy bien
del club y la ciudad y pensaba que esa apuesta era la acertada. No sé si este año, el siguiente o el que sea. Tengo claro que el
Zaragoza es lo mío y que no voy a bajar los brazos. Soy un chico soñador y solo
aspiro a triunfar en este equipo", declaró. (Fotos: Real Zaragoza)