La polémica mano de Iñigo Martínez que no debió ser pitada

06.04.2021
Iñigo Martínez
Iñigo Martínez

Estrada Fernández cometió un error de apreciación al señalar infracción del defensa del Athletic, que la Real pidió penalti y amarilla

I. E.

Una jugada muy discutida en la final entre el Athletic y la Real fue la que sucedió nada más comenzar la segunda parte, cuando Iñigo Martínez se lanzó al suelo para cortar un centro de Oyarzabal desde la izquierda, acción iniciada tras un despeja fallido de De Marcos, en uno de los muchos que hubo a lo largo del encuentro por parte de los leones.

El balón, casi sin distancia y sin tiempo de reacción, pegó en el codo derecho de Iñigo Martínez cuando estaba en dirección a apoyarlo sobre el terreno de juego, en caída y posición natural. Con la otra mano adelantada, la izquierda, intentó evitar cometer falta al pegarla al cuerpo.

El juego estuvo detenido durante casi tres minutos, porque Estrada Fernández consideró que era mano, aunque lo que produjo el parón fue el tiempo necesario para que se chequease la imagen desde el VAR, puesto que la duda residió en si el golpeo sobre el brazo era dentro o fuera del área.

Ninguna toma frontal

El trencilla lo apreció en el exterior, aunque las distintas tomas no consiguieron aclarar la situación, puesto que las imágenes fueron tomadas en diagonal a la línea y no de manera frontal, lo que impidió ver claramente si el brazo del de Ondarroa estaba en el interior del área.

Tras la consiguiente revisión en la sala VOR, decidieron indicarle a Estrada Fernández que la decisión era correcta, y tras cerca de 3 minutos de pausa la falta fue sacada sin consecuencias por Oyarzabal.

En númerosos mentideros donostiarras han sido muchas las voces que se han quejado estos días de que el árbitro catalán no pitara penalti y, además, de que no le hubiera mostrado la tarjeta amarilla al defensa del Athletic, que tras ser amonestado posteriormente por el penalti a Portu, debía haber sido expulsado.

La mano parece que fue dentro, sobre la línea, según se ha podido ver en un vídeo tomado desde una zona en el que se aprecia que el golpeo es en el límite interior, pero lo que también parece claro, es que es un tipo de acción que no debió ser pitada.

El pasado 2 de marzo, en una de las pocas comparecencias que hacen a lo largo de la temporada los responsables del arbitraje nacional, Clos Gómez dio una rueda de prensa explicativa de distintos aspectos relacionados con el VAR, con la explicación de algunos tipos de jugadas, entre ellas, las manos.

"Si está apoyada o camino del apoyo no es mano"

En uno de sus puntos dejó claro cuáles deben ser sancionables y cuáles no. "Si la mano está apoyada o camino del apoyo, no es mano. Mano como herramienta de soporte para mantener el equilibrio", explicó de forma inequívoca en su exposición el dirigente del VAR. Además, acompañada de un elemento ilustrativo, como es una mano de Yeray frente al Valencia, que se tira a cortar un balón y al caer, en el brazo apoyado le pega el balón, por lo que no se pitó, de forma correcta.

En el caso de Iñigo Martínez, está cayendo, a escasa distancia del golpeo, sin ver el balón y en su búsqueda del apoyo le golpea el esférico por detrás. El error más grave fue de Estrada Fernández por señalar como punible la acción. Pero luego vino el fallo desde el VAR, ya que una vez pitada tuvieron que ver que fue dentro.

Sin embargo tomaron la solución fácil, ante el marrón en que se habían metido, concluyendo que era falta, pero fuera del área. Finalmente no tuvo mayor trascendencia, a pesar de que desde numerosos foros realistas quieren hacer ver que era penalti y amarilla para Iñigo Martínez, cuando el error contra el Athletic fue evidente. (Fotos: RFEF)