La desmedida celebración de las realistas en el vestuario de San Mamés
El equipo txuri-urdin femenino festejó la victoria de la segunda jornada liguera ante el Athletic (0-1) como si se tratara de un final
I. E.
El Athletic femenino cayó, 0-1, en el primer derbi frente a la Real Sociedad jugado en San Mamés, ayer al mediodía. Al equipo donostiarra le valió el único tanto conseguido, en el minuto 13, tras introducirse Ainhoa Moraza con la cabeza, en propia puerta, un balón tras un saque de córner de Nerea Eizagirre.
Ese gol pesó demasiado en el posterior desarrollo del encuentro, ante el público congregado en La Catedral, ya que ni rojiblancas ni realistas fueron capaces de volver a marcar en alguna de las ocasiones que hubo hasta la conclusión del tiempo reglamentario.
Ane Azkona tuvo la más clara por parte del Athletic, pero tras un gran pase de Yulema Corres, no pudo salavar la salida de Lete, que despejó el esférico con su pierna. Peke también lo intentó sobre la bocina, pero tras revolverse al borde del área, su chut con la zurda salió ligeramente desviado.
Quiñones, destacada con sus paradas
El equipo txuri-urdin supo controlar bien el encuentro e igualmente hizo intervenir con acierto a la exrealista Quiñones, que se convirtió en una de las destacadas por parte rojiblanca del partido. Las leonas, a base de arreones, consiguieron llegar con opciones de igualada a los instantes finales, pero no pudieron dar continuidad al triunfo de la pasada jornada en la visita al Madrid.
Como no podía ser de otra forma a la conclusión del choque, las bilbaínas marcharon cabizbajas a los vestuarios ya que tenían muchas ganas de ofrecer un triunfo a la afición de San Mames que mostró todo su apoyo durante el encuentro. Tendrán que esperar a la próxima ocasión.
La otra cara de la moneda fue la de las visitantes, cuya alegría se desbordó al conseguir llevarse la victoria frente al que siempre consideran su máximo rival. Solo era el segundo partido liguero, aunque para la Real supuso su segundo triunfo consecutivo y colocarse terceras en la tabla, tras Barcelona y Atlético, empatadas a 6 puntos, también junto a un sorprendente Alavés.
La celebración fue en aumento, hasta llegar a ser un tanto desmedida. Así, se pudo comprobar en un vídeo compartido a través de las redes sociales, en el propio vestuario, en el que las futbolistas de la Real no dudaron en entonar el himno, saltar en grupo, con camisetas al aire, goles en el mobiliario, como si de una final se tratara.
No hace demasiado, en 2018, el primer equipo masculino de la Real,
tras imponerse en San Mamés a los leones, por 1-3, también compartió una foto en
vestuarios, con el propio presidente Jokin Aperribay, en plena euforia. Algo que suele ser habitual cuando doblegan al Athletic, equipo que les motiva
especialmente. (Fotos: Athletic Club / Real Sociedad / Twitter)