Una historia repetida con Elustondo y Williams en el Reale Arana

Un claro derribo del defensa txuri-urdin sobre el delantero del Athletic no fue castigado con penalti, como ocurrió la pasada temporada

I. E.

Llueve sobre mojado. El Athletic logró un trabajado punto en el Reale Arena (1-1), en un partido en el que mereció el empate, en el que de nuevo luchó contra las adversidades y en el que, como el curso pasado, el árbitro escamoteó un penalti al conjunto rojiblanco, con los mismos protagonistas.

Aritz Elustondo, esta vez, no tardó más que un minuto para que en su intento de cortar un claro avance de Iñaki Williams, se la jugó al lanzarse por detrás y derribó al delantero cuando se disponía a engatillar a puerta vacía, con Álex Remiro superado, lo que habría supuesto a los leones adelantarse en el marcador.

El colegiado Martínez Munuera no vio acción punible, aunque pasó casi un minuto escuchando los comentarios desde el VAR, donde estaba Iglesias Villanueva, que tampoco requirió al trencilla ir a chequear la acción en el vídeo.

Pena máxima y amarilla

Recién comenzado el duelo, no consideró la polémica acción, en la que claramente el defensa realista empuja y arrolla con su cuerpo y su pierna al atacante, como para ser castigada con pena máxima, además de haber acarreado la tarjeta amarilla para el infractor.

Al entrar Elustondo con su pierna derecha en una jugada clara para haber metido la zurda y rebañar el balón, arriesgó en exceso ya que aunque toca mínimamente el esférico con el exterior de su bota, no llega a despejarlo, pero evita que Williams pudiera proceder al remate al tirarle al suelo.

Una jugada clave que podía haber variado el desenlace del partido, pero que Martínez Munuera, con una actuación a lo largo del encuentro favorable a los realistas, no la observó como punible.

Echando la vista atrás, el pasado curso, en el derbi en el que también hubo empate. 1-1, con goles de Asier Villalibre y Roberto López, los rojiblancos sufrieron otra acción de Elustondo sobre Williams que tampoco fue castigada con penalti.

Una tarjeta roja perdonada a Merino

Se produjo al comienzo de la segunda mitad, cuando el bilbaíno avanzaba con el balón controlado y al entrar en el área fue de nuevo desplazado con su cuerpo por el zaguero del equipo txuri-urdin, lo que provocó su caída y ni Sánchez Martínez sobre el césped, ni desde la sala VOR apreciaron la clara falta cometida.

Ayer el criterio del árbitro del colegio valenciano dejó mucho que desear y favoreció con sus decisiones claramente los intereses del equipo local, ya que dos manotazos muy similares, el primero en el minuto 26, de Januzaj sobre el rostro de Yeray, no fue castigado con amarilla, mientras que el de Iñigo Martínez a Isak supuso la segunda amonestación del futbolista del Athletic y su expulsión, den el 83.

Además, el colmo de los errores hacia el bando bilbaíno tuvo lugar en el minuto 76 cuando el trencilla cambió el color de la tarjeta a Mikel Merino, de roja a amarilla, al propinar una patada, por detrás, en el tobillo, sin balón a Oihan Sancet en una de sus arrancadas hacia el área donostiarra.